MAYA LA VERDADERA MATRIX

¿COMO SE "ALIMENTAN" DE NOSOTROS?

Este sueño, pues fue un sueño no una visión, lo considero uno de los más importantes que he tenido, porque me mostró la forma en que se nos absorbe nuestro líquido vital, como se nos controla, pero sobre todo como poder zafarse del dominio y esclavitud a que somos sometidos, y con ello expulsar a los personajes que viven dentro de nosotros “alimentándose”, más bien viviendo de nosotros todos los humanos.

El sueño comenzó después de uno de esos sueños normales, oscuros, opacos, de los que no es posible recordar nada. De la profunda oscuridad pasé a un sueño más claro, pero en blanco y negro.

El sueño normal se realiza dentro del cuerpo físico

La tonalidad de los sueños es importante, porque determina el grado de consciencia o inconsciencia.

Vi en mi sueño, como una antigua profesora de bachillerato, la Señorita Estrella, como la llamábamos, que era mi amor platónico, de pie, al lado de un encerado, con un puntero de madera en su mano, parecía iba a enseñarnos algo. Como en todo sueño, el escenario va cambiando constantemente, que es una forma de reconocer lo que es ilusorio, de lo que es real, todos en la clase nos aprestábamos a atender a aquella querida profesora.

La Señorita Estrella, vestía de una manera muy ortodoxa, chaqueta gris, corbata, camisa blanca, falda también gris hasta las rodillas, y un lazo en forma de pajarita en su cuello, el pelo recogido. Pero su

Los sueños en colores indican una alta intensidad emocional

perfecta vestimenta, escrupulosa, clásica, ortodoxa, contrastaba con sus pies descalzos, unas manos con joyas un poco extravagantes, y una mirada lujuriosa. Extendió su puntero hacia el encerado y dijo:

-- Hoy vamos a aprender.

Entonces vi que mi Señorita Estrella, por la que sentía cosquillas en mi corazón, comenzó a mover los dedos de los pies, vi como se elevaban, bajaban repetidamente y finalmente se apretaban contra el piso, como queriendo sujetarlo, esto lo repitió por varias veces. Sentí también que mis pies hacían lo mismo, y entonces los mantuve contraídos, contraje mis pies fuertemente. Seguidamente vi como movía sus manos, giraba su muñeca, como queriendo llegar al antebrazo y seguidamente giraba su mano hasta el lado contrario, apretaba su puño y lo abría, entonces yo comencé a hacer lo mismo, y mantuve contraídas mis manos, al mismo tiempo que mis pies. Finalmente vi como su cabeza giraba levemente de un lado a otro, al mismo tiempo que sus ojos, con mirada lujuriosa, lo hacía en sentido contrario, entonces yo también contraje mis ojos, moviéndolos a izquierda y derecha, aunque levemente. Mantuve contraídos, mis pies, mis manos, y mis ojos, aunque no podía ver ninguno de ellos, en los sueños no se pueden ver ciertas cosas, y estas tres son las principales.

Entonces miré a mi derecha, más atrás de donde estaban mis compañeros de clase, que ya habían desaparecido para aquel momento, vi un cuarto oscuro, sin luz, donde en el fondo, siete u ocho pequeños animales dormían, los detallé, me fijé en que no eran ningún tipo de animal conocido, podrían ser algo así como pequeños perros, pero con abundantísimo pelo, la cabeza simplemente eran

dos ojos recubierto de pelos, y vi el vientre de uno de ellos, donde no había pelaje,  una humedad asquerosa. Aquella humedad, sobre todo en la zona genital, era abundante, sin embargo no tenía órgano genital. En todo aquel tiempo no podía ver nada de mi cuerpo.

Me di cuenta que, el escenario primero, donde estaban mis compañeros de clase, era cambiante, en cambio el cuarto donde estaban aquellos animales era fijo, no cambiaba, por lo que deduje que era un lugar real, entendiendo que era real en los mundos internos.

Entonces giré nuevamente mi cabeza al frente, donde estaba la Señorita Estrella, y vi como aquella mujer comenzó a desnudarse, se quitó la chaqueta y vi sus grandes senos, se desamarró su pelo, y finalmente se bajo la falda. La excitación comenzó a subir, sentir el calor del erotismo, y finalmente aquella impresionante mujer, apoyando sus manos sobre su mesa, poniéndose de espaldas, y bajando su cuerpo, me puso sus nalgas enfrente mi cara, vi su vagina húmeda, y sus líquidos rodeándola.

En medio de mi excitación, mi deseo subiendo, pude pensar, lo que de por sí, no se puede hacer en un sueño, entendí que aquel cuerpo era real, pues pude verle su vagina. El escenario cambio, todo se volvió de colores, era como pasar de ver la televisión en blanco y negro a verla en colores. Miré entonces a mi derecha nuevamente, vi el cuarto donde estaban aquellos animales repulsivos, que al sentir el erotismo, que es como una neblina con la que ellos crean sus escenarios, se levantaron totalmente excitados. Contemplé como cada uno de ellos creaba un escenario, que se relacionaban entre sí. Vi como las fantasías sexuales, que generalmente sueño cuando estoy despierto, se desplegaban ante mis ojos, uno de ellos me mostró a mi mujer yéndose con otro hombre, siéndome infiel, y otro me mostraba a una conocida mía, insinuándose. Me dejé llevar por aquello, dejaba que aquellas fantasías me calentaran aun más. A pesar de que todo el escenario aumentaba, no podía ver mi cuerpo.

En medio de mi excitación, y a pesar de ella, contraje mis pies, mis manos y mis ojos,  no obstante, aquellas escenas seguían allí, me di cuenta que los que las creaban, no podían moverse, no podían

caminar hacia mí, le costaba para mover sus manos y apartaban su mirada de mi, por lo que por momentos parecía que las imágenes se desvanecían y se volvían erráticas. Aunque estaba excitado, podía analizar algunas cosas, los personajes que aquellos seres creaban, para producir la ilusión de ver mis deseos, no podían mostrar sus pies, por lo que buscaban quedar fuera de mi mirada, pero no lo lograban porque yo tenía mis ojos contraídos, escondían sus manos pero aquella vez los pillé. El escenario que habían creado, debía acercarse a mí, pero no lo lograron y pude ver su ilusión porque estaba alejado de ellos.

Entonces sentí alguien a mi izquierda, por lo que giré y vi a mi esposa, que desnuda se arrodillaba a la altura de mi zona genital, aunque yo no podía ver ni mi órgano, ni mi cuerpo. Noté entonces como la corriente que se siente en el pene empezaba a percibirse  con más fuerza, contraía mis piernas para apurar su llegada. Giré nuevamente mi cabeza a mi derecha, y esta vez, en medio de aquellas fantasías, que aparecían desenfocadas, como a trompicones, apareció la imagen de una mujer que deseaba con fuerza, mas grande, más intensa que las escenas de mis fantasías. Noté que el orgasmo se acercaba, y cuanto más  fuerte se percibía, más nítida se veía aquella mujer, entonces noté que bajaba la intensidad de la corriente de mi pene, por lo que el orgasmo se alejaba, entonces también disminuía la nitidez de la imagen de aquella mujer.

En varias ocasiones, el orgasmo se acercó, para seguidamente bajar su intensidad, la figura de la mujer que veía se hacía nítida, disminuía, volvía a hacerse nítida, cambiando de personaje, hasta cuando ya definitivamente parecía que el espasmo iba a producirse escuché un grito:

-- ¿Qué haces?

Era la Señorita Estrella, que completamente vestida, con su traje impecable, su pelo recogido, y esta vez con unos zapatos de tacón muy recatados, pararon toda aquella excitación.


Miré inmediatamente la escena que se había creado, las imágenes eróticas se desvanecieron, vi la realidad que había tras de ellas, los animales que las habían creado buscaban esconderse, porque eran visibles, la luz de la consciencia los asustaba. Pero lo peor fue la imagen central algo mas grande, vi como la hermosa mujer que era el reflejo de mi deseo se desvaneció, para dejar paso a un ser extraño, tenía el cuerpo como el de un hombre, de unos 40 o 45 centímetros de altura, pero su cabeza era de animal, un animal raro, su cabeza era similar a un perro Robwailer, pero su hocico parecía el de un cochino. Con sus manos intentó taparse la cara, no quería que lo viese, en aquel momento vi algo que me impresionó. Aquel ser, se oscureció de tal manera, que todo alrededor seguía viéndose, pero su

figura, su silueta se volvió completamente negra, de un ser tridimensional se trasformo en un ser bidimensional, era como una hoja negra, donde se había recortado una silueta de un hombre con cabeza de perro. Entendí que se convirtió en una sombra para no ser visto.

Vi que todas aquellas escenas eróticas, se fueron desvaneciendo, y se transformaron en una neblina, que flotando se fue acercando hacia mí, hasta que se adhirió a mi cuerpo, que entonces si pude ver, este, no era igual a mi cuerpo físico, era diferente, pero con el cual puedo moverme en los mundos desconocidos para los humanos.

Evidentemente, aquellos animales, que son los que crean mis fantasías, siguen allí, y cada vez que me excito tengo que enfrentarme a ellos, o ellos me roban mi fuerza vital, o yo me quedo con ella.

Aquel sueño, representó un cambio en mi vida, La Mala, esa cabrona que en tantas ocasiones me había hecho aterrorizarme sin ningún tipo de consideración, ni piedad, por primera vez no me asustó, y me enseño algo muy importante para alguien que como yo siempre he buscado conocer lo que hay dentro de mi mente y de mi cuerpo.

La Mala, utilizo la misma fantasía que utilizan los seres animales que viven en mí, pero a diferencia de ellos, es un ser real, con una fuerza mucho más intensa, por lo que en este sueño, se transformó en la Señorita Estrella, y en mi esposa.